sábado, marzo 27, 2010

un minuto...


los aviadores rodean mi casa
los trapecios del techo tiemblan
ante la vibración de sus motores airados

algunos muertos adornan la pared
parece un jardín de labios sellados
un bosque torpe de brazos huesudos
desnudo todo de hormigas y hojas
caliente
arenoso
seco


la estación de verano se ha fumado esta calle
trozo acolchonado en el cemento de mi balcón
hilo de acero cerrando ventanas
órbitas desequilibradas sobre mi sala

tuve una historia
historia de fin con principio
quiero creer que todo aún vive
pienso entonces en como
roncan ejércitos de duendes
monstruos borrachos cuelan café
y me apresan los trucos equivocados de mirar la luna
en un intento de arrancarme el pellejo
y hacerme licana
y destruir esas paredes,
y tumbar los aviones que retumban en casa
sólo para crear un suelo suave
y tender almohadas bajo sus cuellos

de cada minuto marcado en el tiempo
cincuenta segundos son para el olvido
ocho para el recuerdo
dos para reaccionar

1 comentario:

Unknown dijo...

Hola! Soy estudiante del Prof.A.Vélez en POPAC.Me envió a escoger un texto tuyo e interpretarlo a mi manera como asignacion.


El cielo retumba como nunca lo hacia hecho.Tronaba y temblaba sin cesar;por ahora algunos muertos debido al cielo maligno y gente sin ropa pq las ráfagas se las quitaban.Está destruyendo todo lo que encuentra por delante.Si tragas esas malignas ráfagas de viento puedes terminar como un duende o como un monstruo cuela café.A la gente ya se le empezaba a caer el pelo por la velocidad de las ráfagas.De repente para,el mal duro apenas un minuto;pero los desastres eran visibles en todos lados.Asique cuando vea el cielo con nubes feas solo sople sin parar para que veas q no va a llegar al destino.


Disculpe los inconvenientes y gracias.